El paseo al Saldo de Escarrilla, es uno de los paseos más fáciles (y concurridos) que se pueden hacer en el Valle de Tena. No llega a 8 kilómetros ida y vuelta, y un desnivel acumulado de 268 metros, muy gradual y cómodo. Hay dos rutas. Explicamos aquí las más suave y sencilla. Cuando lleguéis a Escarrilla, cogéis la carretera que va hacia Sandinies. Nada más salir de Escarrilla, a mano derecha veis una nave agrícola. Cogéis ese desvío y a unos doscientos metros hay un aparcamiento. Ahí dejáis el coche ya que está prohibido continuar. (os exponéis a una multa) y empezáis a andar vais a llegar hasta una granja de ganado vacuno. La dejáis a mano derecha y continuáis por la pista. Llegáis hasta una primera puerta de ganado. La cruzáis ( si estaba cerrada, la volvéis a cerrar) y continuáis subiendo. A poco llegáis a una zona arbolada. Disfrutar de esa sombra.
En seguida llegáis a una segunda puerta de ganado. La cruzáis y empezáis un suave descenso. Cuando os encontráis que la pista hace una curva a la derecha, observáis que a mano izquierda hay un marcado sendero. Tomáis ese sendero y ya continuáis ese marcado sendero hasta el saldo de Escarrilla.
Durante el paseo podéis observar una gran cantidad de plantas y árboles, arbustos y flores. Hayas, robles, cerezos, abedules…
Este paseo se puede hacer en cualquier época del año. Recorrer estos senderos nevados con raquetas de nieve es una experiencia al alcance de cualquiera
El saldo de Escarrilla, una espectacular cascada, y una badina o poza de aguas claras y cristalinas, donde ¡¡¡¡ESTA TERMINANTEMENTE PROHIBIDO EL BAÑO!!!! ya que es la captación de agua potable para la localidad de Escarrilla.